Día 3: Oak Alley Plantation

10 de agosto de 2012

Hoy nos tocaba ir a visitar una plantación en Lousiana. Pero primero, hemos desayunado en el hotel unos Wafles que nos hemos hecho con nuestras propias manos.

Mientras desayunábamos, un chico ha intentado colarse en la sala de desayunos disimuladamente para comer algo, pero la de la recepción le ha echado. Lo cierto es que por esta zona se ve mucha pobreza. Hace unos años, Baton Rouge era la segunda ciudad más poblada de Lousiana después de Nueva Orleans, pero después del huracán Katrina, muchos habitantes de Nueva Orleans se quedaron sin hogar y se tuvieron que trasladar a vivir a Baton Rouge, convirtiéndola en la ciudad más poblada de Louisiana. Eso trajo más pobreza todavía, porque muchos se vinieron sin nada.

El hotel, muy clásico, como todos, y con el Ford en la puerta.

El puente de Baton Rouge que cruza el Mississippi.

Llegando a la plantación. Está en una carretera que une Baton Rouge y Nueva Orleans, y que va por la ribera del Mississippi. El pueblo en el que se encuentra se llama Vacherie.

Esta es la mansión de la plantación. Elegimos esta, porque entre otras películas, aquí se rodó "Entrevista con el vampiro" y "El largo y cálido verano".

La visita era autoguiada, o sea, que te daban un folleto en inglés y tu te las apañabas.

Como el nombre de la plantación indica, (Oak = roble), pues en la plantación hay robles por todos lados. Este camino, era impresionante en vivo, y la foto no le hace justicia.

Nos han hecho una pequeña visita guiada al interior de la casa con guía vestido de noble de la época. Esta sala era la recepción de la casa.

El Hall con sus escaleras.

El comedor. Esa especie de abanico gigante colgado del techo, tenía atada una cuerda que estaba enganchada en la pared, y parece ser, que cuando los comensales tenían calor, un esclavo tiraba de la cuerda, haciendo mover el abanico y refrescando a los señores. No es broma. 

Este era el dormitorio principal.

Esta es la habitación de los niños. Según dijo el guía, los esclavos tenían que velar el sueño de los niños, evitando que ratas u otros animales, les mordieran por la noche. Por lo visto, en esa época, era muy normal que las casas estuviesen llenas de animales de esos.

Habitación de los abuelos.

La casa por dentro es muy elegante.

Las vistas desde la terraza.

Esa casita es la cochera, que en viejos tiempos, es donde estaba establecida la cocina.

Este es nuestra guía.

Frente a la mansión, había un montículo que daba al Mississippi. Allí, se podía apreciar este antiguo barco. 

Para que digan que los Ford no duran.

Gente recreando alguna vieja historia.

En esta pileta original, antiguamente se metía el algodón para separar el azúcar. Esta era la función de esta plantación. Fabricar azúcar.

Esta es una recreación de como eran las casas de los esclavos. Este edificio eran dos casas, y en cada una vivía el esclavo con toda su familia.

Por dentro, era muy pequeña.

En esta zona, el calor y la humedad es axfisiante.

Acabada la visita, nos dirigimos a Dallas. Un pequeño paseo en coche.

En una gasolinera. Este es la cámara acorazada donde guardan las cervezas.

Me compré una coca cola granizada.

Pedazo de bicho que había pegado en el surtidor. Menos mal que no tuve que usar los botones.

Y llegamos a un nuevo estado: Texas.

Y una vuelta por Dallas.

Dormimos en un Microtel Inn en el pueblo de Irving, al lado de Dallas.

Esta habitación con desayuno incluido por 28 euros, sólo es posible en América.

Fin de jornada cenando en un iHop.